¿Las redes sociales son una cloaca donde desahogamos todo lo que ocultamos?

Esta es una pregunta que nos podemos plantear diariamente y en cada una de las plataformas virtuales a las que ingresamos y hacemos parte.

Estamos en la obligación de reflexionar en el uso que le damos a las redes sociales, saber que debemos cumplir unas normas y obligaciones, somos parte de una sociedad y tenemos unos deberes los cuales debemos cumplir y contamos con unos derechos que prevalecen tanto en el espacio físico como en el virtual.

El panorama que se vive en la actualidad en redes como Twitter, Facebook o Whatsapp es el encuentro de emocionalidades que llevan a atacar indiscriminadamente a quien sea distinto a lo que siente.

Colombia vive esas tensiones desde hace varios años, las discusiones, los improperios y los ataques indiscriminados son el día a día en las redes sociales, pero es un punto que se puede tornar más complejo, ya que podemos preguntarnos si esto es una transgresión de la debacle social que se vive en los espacios físicos y reales.

La campaña Bajemos El Tono nos plantea esa evaluación de nuestras publicaciones, de nuestras reacciones o de nuestras emociones al momento de tomar un dispositivo digital para usarlo en contra del otro y no a favor de la construcción de conocimiento y crecimiento propio.

Pero no cabe duda que debemos bajar el tono tanto en las redes sociales como en nuestro día a día, en saber convivir con las diferencias o entender que en una sociedad democrática y pluralista tenemos cabida todos.