Levantarse en el campo, respirar aire puro y trabajar con ganado es el sueño de muchas personas con raíces y espíritu de campesino antioqueño. Ellos no han perdido el gusto por la tierra, las montañas y sus atardeceres, tampoco por el olor a boñiga o el trabajo duro. Tienen la fortuna de sentir todavía que la civilización no ha hecho mella en sus mentes, ni tampoco en sus cuerpos y menos en sus almas. Aunque no todo puede ser color de rosa para los productores de leche, ni para el personal que labora en los hatos, ni para los proveedores de insumos agropecuarios; existe una crisis en el sector lechero de la región norte de Antioquia, debido a la falta de políticas claras por parte de las autoridades, las cuales hacen incierto el futuro.
El presente del sector lechero es difícil y debe enfrentar diferentes amenazas. Las importaciones de leche en polvo, la sobre oferta por parte de los productores, la gran cantidad de personal no requerido, el valor del cambio de las monedas extranjeras son varias de las causas de la problemática de un sector antes sólido y fuerte en la región.
Según las precisiones de Hernando Vélez, gerente de la Sociedad Monterredondo, dueños de la hacienda las Cumbres ubicada en el municipio de Bello, vereda Charco Verde, cada día es más difícil hacer las cuentas de fin de mes, cruzar gastos con utilidades es muy complicado, el sector lechero está muy golpeado por los tratados de libre comercio y tienen en aprietos a los pequeños y grandes productores de la zona norte del departamento de Antioquia. No es viable desde ningún punto de vista cambiar el ganado de leche por ganado de carne, eso sería cambiar de industria y no estamos preparados para hacerlo ni contamos con los recursos.
La única opción sería asegurar el sector, diseñando una salvaguardia por parte del gobierno nacional para los productos lácteos que ingresan al país, renegociando el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y con Europa. De otra forma estaremos invadidos de leche y no tenemos donde almacenarla, afirma Vélez, quien añade que el producto no se puede regalar como se creería, esto puede traer consecuencias para la salud de las personas si es consumida sin llevar a cabo el debido proceso de pasteurización, por lo anterior, nos veremos obligados a botarla.
De no contar con apoyo desde el Ministerio de Agricultura, los empresarios y propietarios de fincas de lechería especializada no podrán seguir sosteniendo sus haciendas, se verán obligados a tomar una dura decisión, aunque con mucha frustración, de acabar con las empresas y vender las tierras.
Para disminuir los costos en el hato, están obligados a tomar medidas drásticas tales como reducción del número de vacas productoras, suprimir parte del personal, insumos y maquinaria en general; esto se empieza a convertir en un grave problema social para el país, porque estas familias se quedarían sin donde vivir y entrarían en la cadena de migrantes a la ciudad, pasando la Sociedad de ser una fuente de empleo, a aumentar los niveles de desempleo y falta de oportunidades para estas comunidades.
Buscando una opción para sacar adelante el hato se vinculo a la hacienda Uriel Rodríguez, zootecnista de la Universidad de Antioquia, quien tiene la tarea de hacer más eficiente y rentable el hato, trabajando en diferentes frentes: clasificación, ciclos de vacunación, programas de inseminación y descartes, aplicación de proteínas requeridas a los pastos para el ganado sea más , verificar con el personal experiencia necesaria para lograr el cumplimento de los objetivos planteados. La hacienda cuenta con nueve trabajadores en el momento, haciendo labores de: arreadores, ordeñadores, tractoristas, fumigadores, alambradores, a quienes debe hacerles programación, control y seguimiento de sus funciones; además, debe velar por mantener los volúmenes de insumos y herramientas necesarias . También debe hacer cumplir el programa sanitario de la finca, llevándolo a cabo con responsabilidad y con ello garantizar unos estándares de salubridad elevados garantizando altos niveles de producción de leche.
Desde su vinculación tiene como reto en su función administrativa buscar un menor gasto en el consumo de los diferentes concentrados, de acuerdo a la edad de los bovinos entre menos concentrado se le de a un animal y este consuma mas pasto y heno ricos en proteínas, se logra una alimentación balanceada y nutritiva, dando como resultado unos menores costos en la producción y mayor rentabilidad.
Para Ledys Zapata Palacio, directora de la Umata de esta región, en una zona de lechería intensiva es bastante complicado mantener el terreno con solo abonos o fertilizantes orgánicos. Aunque es una opción viable, no es enteramente efectiva y además trae otra serie de complicaciones. En los municipios vecinos, por ejemplo en Donmatías, hay una gran explotación de la ganadería y “todo parece un desierto, incluyendo las orillas de las quebradas, porque todo lo han reforestado para tener ganado». Se está viendo un incremento importante en el número de marraneras. En vez de los abonos químicos, los productores de leche utilizan el estiércol de los animales como fertilizante, que aunque es efectivo, genera problemas. Zapata Palacio comenta: “se están contaminando las fuentes de agua con los residuos de las porquerizas porque hay demasiados cerdos y la tierra no alcanza a absorber todo el estiércol y por escorrentía baja a las fuentes de agua«, esto es grave sobre todo para los neonatos o terneros, porque se les debe garantizar agua libre de bacterias y de estos depende el futuro de la razas y de la productividad de las fincas.
Clara Vélez, una de las dueñas de Moterredondo Sociedad, cree que existen muchos factores importantes que inciden en la disminución de la rentabilidad que tenía para nosotros el hato lechero. Por eso hoy en día hemos dejado de percibir las utilidades que se repartían a finales de año a cada uno de los dueños de la sociedad. El Tratado de Libre Comercio es un factor clave para la crisis de la economía familiar y del sector, debido al alza en los costos de los insumos indispensables para una optima y rentable producción lechera, tales como: fertilizantes, concentrados, abonos, mano de obra, entre otros. Estos factores ocasionaron el declive de este mercado,sumado al tema de la seguridad en materia laboral, para garantizarles a los trabajadores y a sus familias las prestaciones sociales, y evitar el desplazamiento de los campesinos a las ciudades a buscar nuevas fuentes de trabajo o al contrario aumentando los índices de una economía informal, desempleo y delincuencia.
La industria lechera está afectada por diferentes causas. Si no se unen esfuerzos para levantar una voz de protesta ante las diferentes corporaciones donde se encuentran agrupadas las empresas y familias de las regiones del país que tiene esta problemática para lograr el apoyo de las autoridades parece muy lejana una solución pronta a esta problemática.